Qué tienes que decir?

Me levanto temprano, hago ejercicio, me preparo un café, me siento a escribir..... y nada....

Es como si lo blanco de la hoja de papel me intimidara...
Como si no tuviera nada importante que decir...
Como si todas las ideas y palabras que tenia listas en mi cabeza desaparecieran.

Obviamente sale mi loser (si, ese ser en tu interior que se dedica a pisotearte), se ríe y sale con su clásico comentario: "tú que tienes que decir?" o "tú que podrías compartir?" o, el más temible y efectivo, "a nadie le va a interesar". Claro que intimida y más largo se hace el tiempo y más blanco lo blanco y vacío de la página.

Irónicamente, esta pregunta: "tú que tienes que decir?" que muchas veces puede ser el freno total a tu intención, puede ser también el motor que te mueve hacia la inspiración y la creación.

La realidad es que todos tenemos algo que decir, o algo que enseñar o algo que hacer. A veces no lo tenemos claro por ese temor que traemos dentro, pero nuestra experiencia vale mucho y las personas alrededor nuestro lo saben, a veces mejor que nosotros mismos. 

Si tus consejos o palabras han hecho bien a alguien, han brindado ideas, claridad o paz, claro que tienes algo que decir! y lo mejor de todo, es que eso, que probablemente para ti no sea tan relevante y que crees que es obvio, no todos lo saben y seguramente alguien necesita escucharlo.

El chiste esta en tomar a tu loser (yo a la mía me la imagino igualita a Desagrado, el personaje de la película de Disney "Intensamente", verde, con brazos cruzados, jeta y ojos rodando hacia arriba), guardarla un rato, y conectar con tu esencia, darte chance de responder esa pregunta desde el fondo de tu ser, desde tu centro: "que tengo que decir?", "qué puedo compartir?".

Cuando haces esto, respiras, te escuchas, te sientes...
poco a poco las palabras fluyen...
y sin darte cuenta...
creaste algo lindo.

Pasta de dientes

Vivir simple, sin complicaciones. Sin prisas, sin dañar el medio ambiente. Con coherencia entre lo que predicas y la forma en la que vives. 

Vivir como en los tiempos de antes, con calma, preparando y haciendo lo que necesitas. Alejándonos del consumismo y sin prestar tanta atención a la mercadotecnia que se obsesiona con convencernos de que necesitamos tener todo.

Algo que disfruto mucho de este nuevo estilo de vida es hacer muchos de los productos que realmente necesitamos. Como la pasta de dientes.

La pasta de dientes comercial, aparte de ser muy abrasiva y venir en contenedores de plástico que no se reciclan, contiene triclosan, detergente, flúor, sacarina, hidróxido de sodio,... en fin, químicos que mas que ayudarnos, terminan haciéndonos daño a largo plazo.

Hacer tu pasta de dientes es muy sencillo, nosotros en casa usamos dos versiones:
  • Cuando el clima es fresco, la que mas nos gusta es la de aceite de coco, para hacerla necesitas 3 ingredientes: aceite de coco, bicarbonato y unas gotas de aceite esencial comestible de menta (o del sabor que prefieras). Solo mezclas los ingredientes a que te quede una pasta con la consistencia y sabor a tu gusto.
  • La segunda opción que usamos cuando hace mucho calor (el aceite de coco se derrite fácil y a mis hijos no les gusta cepillarse con esa pasta cuando está tan liquida) es una mezcla seca de bicarbonato con aceite de menta. Lo mezclo, lo dejo secar y lo pongo en un salero.
Es muy sencillo, muy rápido de hacer y tanto el bicarbonato como el aceite de coco son muy benéficos para la salud de nuestra boca. Si quieres leer mas sobre los beneficios del aceite de coco y del bicarbonato da click aquí, aquí y aquí.

(Nota: en el medio se comenta mucho sobre el "oil pulling", aún no lo he intentado, pero dicen que es maravilloso! Puedes leer sobre esto aqui.)

 Nuestros cepillos de dientes son de bambú y se ponen en la composta una vez que ya no sirven, otra cosa que no llega a los basureros!

Reflexión

Pausar un momento (cada cierto tiempo) y detenernos a reflexionar sobre lo que estamos haciendo, lo que queremos, nuestros sueños y objetivos y analizar todos los pasos que hemos dado (y seguimos dando) para llegar a ello, nos ayuda a acercarnos a nuestra meta.

Este fue el primer post de este blog: un manifiesto de lo que yo quería en ese momento, lo que yo necesitaba. Felizmente puedo decir que sigo en el camino correcto! Se los comparto nuevamente:

Quiero vivir con significado. Quiero calidad de vida.
Simple, sin prisas, sin complicaciones, sin excesos.
Disfrutar, experimentar, resolver creativamente.
Dedicarme a lo que me gusta y sé hacer.
Enfocarme en ser, no en tener.
Con tiempo, con libertad.
Con energía positiva.
Independiente.
Confiada.
Feliz.

Recuperemos el control.

      "El enemigo de tu éxito personal es la distracción constante."                                                                            Enrique Delgadillo

Es real, perdemos el objetivo de lo que queremos hacer con todos los distractores que nos rodean y al no avanzar, al estar tan distraídos, nos alejamos de nuestra meta.

Nos sentamos a "trabajar" en la computadora o tablet pero nos metemos a facebook, a redes sociales, a "buscar inspiración" en artículos, blogs, pinterest, etc... y cuando nos damos cuenta, ya pasaron 2 horas y no hemos hecho lo que queriamos. Estudios recientes dicen que la mayoría de las personas pasa 20 minutos cada hora lidiando con distracciones no planeadas (es mucho tiempo, no?).

Los teléfonos inteligentes, ipads, ipods, tablets, etc... nos tienen dominados. A veces estamos comunicándonos mas con alguien que no está presente que con la persona que tenemos frente a nosotros. Resolviendo cosas del trabajo cuando supuestamente estamos dedicando tiempo a nuestros seres queridos. Cuándo fue la última vez que estuviste con alguien o en alguna reunión donde nadie se distrajera con algún aparato?

Necesitamos recuperar el control.
Necesitamos respetar mas a quien nos dedica su tiempo y su presencia.
Necesitamos enfocarnos en lo que estamos haciendo, necesitamos estar presentes al 100%.

Escucha esto: (no te alarmes, es real!!) podemos apagar o silenciar los distractores! Podemos no contestar (a menos que sea algo urgente o muy importante), no abrirlos, no encenderlos y el mundo no se acaba, no pasa absolutamente nada.

Esta idea de que tengamos que estar accesibles para todos en el momento que nos "necesiten" nos está quitando libertad y nos está distrayendo de lo importante para nosotros. El querer tener todas las respuestas, resolver todas las dudas y que todo sea inmediato, siento que es antinatural y que está haciendo mucho daño. Nos hace estar en todo y en nada al mismo tiempo. Con todos y con nadie. 

Necesitamos recuperar el control.
Necesitamos desconectarnos un poco y enfocarnos en nuestra meta, es la única forma de alcanzarla.

Trauma y TRE



Al escribir, menciono mucho la importancia de escuchar a tu cuerpo, de temblar y soltar, sin embargo no he explicado a que me refiero exactamente o a que me dedico, aquí va:
Soy facilitadora de TRE (Trauma Releasing Exercises / Ejercicios para la liberación del estrés y trauma).
TRE es una técnica que utiliza ejercicios para liberar la tensión y el estrés del cuerpo. Estas tensiones se van acumulando como consecuencia de la dinámica de la vida cotidiana, ante situaciones difíciles o estresantes, o debido a situaciones traumáticas (como desastres naturales, violencia social o doméstica). Los ejercicios de TRE evocan un proceso de temblor muscular que se origina en el centro profundo del cuerpo, que nos ayuda a liberar tensiones, a relajarnos profundamente, a no sentirnos en alerta constante y nos devuelve el control de nosotros mismos.

En otras palabras: hacer TRE es como ir a terapia y soltar sin tener que hablar. El cuerpo es el que deja ir toda esa energía atrapada dentro de él a través del temblor.

Aprender a hacer TRE cambió mi vida. Fue como la piedrita que comenzó esta avalancha de cambios positivos y de conexión conmigo misma. Desde que comencé a practicarlo me siento ligera, relajada, menos reactiva (tanto que hasta mis hijos lo han notado - y hasta abusado de ello en ocasiones, así me lo han confesado!) y muy consciente de las sensaciones en mi cuerpo. Me ha ayudado a tener una visión más clara de lo que quiero de la vida, a sentirme mejor conmigo y a relacionarme mejor con las personas a mí alrededor.

Poder compartirlo ha sido la mejor experiencia. Poder ayudar a los demás a recuperar su poder, a que conecten nuevamente con su cuerpo y aprendan a escucharlo y a confiar en su sabiduría, sin tener que hablar ni analizar nada, ha sido un gran regalo para mí (por eso digo tanto que amo lo que hago!!). Me siento honrada de poder acompañar a otras personas mientras conocen y aprenden esta herramienta maravillosa.

TRE ayuda a liberar el estrés cotidiano pero también traumas que a veces ni sabemos que venimos arrastrando, porque lo hace desde un nivel físico, desde la memoria del cuerpo.

Acabo de escribir un artículo para el blog de Bethsana sobre como nos afectan los traumas, se los quiero compartir (y si quieres saber mas sobre TRE haz click aquí): 


Comprendiendo el trauma
La clave para entender como el trauma afecta nuestro cuerpo está en entender cómo reacciona nuestro cerebro ante él.
Cuando tu cerebro experimenta un evento que percibe como una potencial amenaza a tu vida (cualquier evento con una combinación de consecuencia negativa y un estado de impotencia relativa hacia el evento mismo) la neuroquímica instintiva enciende las estrategias de supervivencia naturales: las reacciones de huir o luchar que se envían por todo el cuerpo, listas para tomar acción ante lo que estamos experimentando.
El problema es que el cerebro humano tiene una manera de asociar muchas cosas – que han sido seguras durante mucho tiempo – con el trauma real que ya pasó, lo que ocasiona que se enganche en este proceso neuroquímico una y otra vez, mucho tiempo, a veces incluso años después que la amenaza real ha desaparecido.
La neuroquímica de la impotencia se reactiva tan seguido que mantener un estado de lucha/huida se vuelve un hábito lo que resulta en patrones comunes asociados al trauma como: dolor crónico, depresión, ansiedad, miedo, tensión, síndrome de estrés post-traumático, dependencia, etc. Para empeorar las cosas muchas de las reacciones que han originado esto han sido falsas alarmas.
Cuando se activan estos instintos de supervivencia de huir o luchar, tu cuerpo recibe instrucciones para estar preparado para acción crítica. Si eres capaz de evadir la amenaza real o percibida, tu Sistema Nervioso Autónomo (SNA) – el encargado de controlar los instintos de supervivencia, así como todos los sistemas de tu cuerpo: nervioso, cardíaco, digestivo, circulatorio, etc.. – apaga los instintos de huir o luchar permitiéndole a tu fisiología regresar a un estado de balance donde una verdadera sanación puede ocurrir.
Pero cuando no puedes reaccionar contra esa amenaza – o quizá solo percibes una amenaza que no es genuina – tu SNA se congela en un estado de huir o luchar, considerando al trauma como una amenaza latente para tu supervivencia.  En este estado, tu cerebro maneja tu cuerpo a toda velocidad –  aunque no está diseñado para aguantar esto a largo plazo – originando que se desgaste o desmorone después de un tiempo. Lo que resulta en condiciones crónicas que aparecen en varios sistemas de tu cuerpo y que pueden instalarse en tu cerebro, tu cuerpo y tu vida, teniendo un dramático impacto fisiológico en tu cuerpo y dictando tu calidad de vida.
Algunas de las condiciones críticas que crean esto pueden ser: accidentes, muertes, divorcios, enfermedades, violencia, problemas económicos, abandono, alcoholismo, rechazo, desastres naturales, abusos, etc. e incluso eventos  que podemos no haber considerado que fueran traumáticos para nosotros como una pelea con la pareja, exámenes en la escuela, problemas en el trabajo, etc.
Al estar en una situación similar a un trauma que hemos vivido y recordar esa experiencia, se reactiva en nosotros la respuesta de huir o luchar y revivimos lo experimentado en ese momento, reaparecen emociones como el miedo, la impotencia,  la ansiedad, el estrés y las sensaciones físicas como  tensión, rigidez, dolor, aunque la amenaza no sea real.
Generalmente experimentamos:
  • aumento en la actividad cardíaca
  • dificultad para respirar
  • manos sudorosas
  • tensión
  • dolor crónico recurrente
  • incapacidad para enfocarte y tomar decisiones
  • problemas digestivos
  • puños y quijada apretados
  • reacciones emocionales
Cada vez que estas reacciones se reactivan también se refuerzan y se vuelven un hábito con el tiempo. Lo que nos mantiene en un estado de estrés y tensión constante.
Hay muchas técnicas que nos ayudan a lidiar con los traumas y trabajarlos pero el secreto para realmente resolverlos está en recordar que nuestro cuerpo es nuestro contenedor emocional y que debemos de trabajarlo desde nuestra fisiología. TRE (Trauma Releasing Exercises) es una herramienta que nos ayuda a enviarle el mensaje a nuestro cerebro de que la amenaza se ha ido, le ayuda  a apagar esa alerta y a liberar toda esa energía de la respuesta de huida/lucha atrapada en nuestro cuerpo desde nuestro SNA. Genera un estado profundo de relajación en el cuerpo y nos permite volver a un estado de balance donde – sin tener que analizarlo – encontramos esa sanación física y emocional que tanto necesitamos.
 
Lara Markus
Facilitadora Certificada de TRE

Sin químicos



Antes cuando se acababa algo inmediatamente lo tiraba, ahora no. Ayer se acabó el talco. Utilicé el mismo bote re-llenándolo con maizena.

La verdad me encanta estar en este canal, donde lo que tiro y lo que consumo realmente me afecta y no lo tomo a la ligera. Donde consumo con conciencia.

Acabo de ver un video sobre los químicos que se encuentran en la industria cosmética y en los productos que la mayoría de las personas utiliza cada día:

  • Formaldehido (causa cáncer en los seres humanos) se encuentra en: esmalte de uñas, shampoo, lociones y gel para el cabello
  • Triclosan (afecta nuestro sistema inmunológico) en: jabones, desodorantes, pasta de dientes
  • Parabens (encontrado en tumores de cáncer de seno) en: lociones y ungüentos
  • Óxido etílico (cancerígeno) en: fragancias y shampoo
  • Plomo (neurotóxina asociada con problemas de conducta y de aprendizaje) en: labiales, base de maquillaje y más de 650 cosméticos
  • estos eran los que aparecían en el video ¿cuántos más habrá que a lo mejor no seamos conscientes aún del daño que están causando?

Ya no es solo cuidarte de que contiene lo que comes sino también lo que pones en tu cuerpo. Da susto pensar en las consecuencias a futuro, porque desgraciadamente así es como funcionan estas cosas, lento, poco a poquito y en algunos años aparecen los síntomas del daño que nos hemos ido ocasionando nosotros mismos.

Al cambiar mis hábitos de consumo, la principal razón fue dejar de tirar empaques, dejar de generar basura. Los beneficios adicionales han sido una maravillosa sorpresa. 

He hecho muchos cambios que aparte de evitar generar residuos han sido muy buenos para nuestra salud. Sin darme cuenta dejamos de consumir, ingerir y estar en contacto con tantos químicos dañinos.

Y suena muy complicado cuando nunca lo has hecho y da mucha flojera y no crees que vayas a lograrlo, pero una vez que lo intentas y haces tus propios productos, no vuelves a lo de antes.

Estos son algunos ejemplos de lo que hemos dejado de consumir y los productos o ingredientes por los que lo hemos sustituido:

  • desodorante = maizena+aceite de coco+bicarbonato (actualización: en época de calor usamos desodorante en polvo = maizena+bicarbonato, el aceite de coco se derrite con tanto calor)
  • talco = maizena
  • shampoo y jabón comercial = jabones artesanales sin empaque
  • pasta de dientes = aceite de coco+bicarbonato+aceite esencial de menta (actualización: también lo sustituimos por pasta en polvo por el calor = bicarbonato+aceite de menta, el aceite estaba muy liquido y a los niños no les encantó la idea)
  • perfumes = aceites esenciales
  • blush = cocoa
  • crema facial = aceite de coco+vitamina e (sigo usándolo a pesar del calor, me encanta)
  • crema humectante = aceite de coco

También en la cocina:

  • catsup = puré de tomate+miel+vinagre+especies
  • harina para hot cakes = harina+maizena+polvo para hornear+azúcar
  • refrescos y concentrados para agua = aguas frescas con frutas de la temporada
  • y muchas otras cosas más que ahora en vez de comprar procesada, empaquetada y con ingredientes dudosos o impronunciables, preparamos desde cero 

Cambios que se han ido dando sin esfuerzo y sin que quiten el tiempo que antes que vivía "corriendo y ocupada" hubiera pensado que me iban a tomar. Todo se hace super fácil y muy muy rápido y vale la pena la espera!

Casi no generamos basura y aparte nos hemos vuelto muy creativos e ingeniosos. Cuando algo se acaba ya no pensamos en salir a comprarlo de inmediato, primero vemos que hay en casa con lo que se pueda sustituir, si de verdad necesitamos adquirirlo de nuevo y que consecuencias va a tener esta adquisición (¿basura?¿químicos?¿necesidad o costumbre?) .

Es un estilo diferente, todavía no tan común pero cada vez veo más personas que buscan esta forma de vida. Es muy satisfactorio y creo que uno de los mejores cambios que hemos hecho. Y que tres adolescentes lo hagan con gusto, con orgullo y digan que así lo van a seguir haciendo con sus hijos, bueno, me afirma que estoy haciendo las cosas bien!